lunes, 24 de noviembre de 2014

NO OS QUEDAIS ATRAS



















(a los compañeros en su otra existencia)

Os fuisteis como una puesta de sol
que inexcusablemente busca su límite.
Sin los laureles imprecisos
de quien continúa escribiendo la existencia.

Como flor que inalterablemente fiel,
esgrime sus pétalos de un proceso vital
donde un  péndulo de espumas,
viaja sinfónicamente hasta  playas insólitas.

Nadie se queda atrás,
sino que permanecemos en el ahora
encadenado y sin reglas,
de un embarazo continuo.

Igual que una gota de agua a otra sucede,
así vuestra presencia construye un celuloide sonoro,
donde todo es real
y el ayer se confunde con el aire
en una confirmación infinita.

Al reflexionarnos, nos tenemos tan cerca
que casi podemos palparnos.

                                                                            
Andrés Osado Gracia


jueves, 13 de noviembre de 2014

REENCUENTROS DE UNOS NIÑOS SESENTONES

(Reeencuentros de unos niños sesentones o unos sesentones que viven nuevamente con la ilusión de aquellos años de Seminario en los que también fueron niños)

Seis reseñas de otras tantas reuniones del grupo de Córdoba
por Francisco Solano Raya Marqués.

Han sido tan intensas las vivencias y sentidas emociones, compartidas en todas y cada una de nuestras reuniones, desde aquel momento en que dimos los primeros pasos hasta lo que ha significado, me atrevería a decir sin temor a equivocarme, la consolidación de un maravilloso grupo humano que vive intensamente esta bendita locura colectiva, que me resulta muy complicado hacer una fiel recapitulación de los acontecimientos vividos.
En común en todos los encuentros, aparte de la intensa emoción de los mismos, el re-descubrir en aquel sesentón o aquellos sesentones que vuelves a ver tras tantos años, a ese niño o a esos niños que conocimos hace ya más de cincuenta, en aquel entorno, primero inhóspito y después acogedor y maravilloso, de nuestro querido Seminario de Santa María de los Angeles, de la localidad cordobesa de Hornachuelos.
Huelga decir que hasta hoy ha sido imposible, pese a que en reiteradas ocasiones lo he intentado, poner en común tantas y tantas conversaciones paralelas, unas veces porque cortar dichas conversaciones cercenaría las emociones y vivencias personales de los recuerdos vividos entre los integrantes de cada grupo y otras veces porque la distancia física entre unos y otros era insalvable. Imperaba sobre toda intención preconcebida o programada, la necesidad de cada uno de relacionarse, quizás con el que más afinidad tuvo en la niñez. No obstante todos los momentos vividos, individual o colectivamente, fueron absolutamente maravillosos y quedarán plasmados, como ha hecho ya Andrés Osado Gracia, en comentarios en el blog donde pretendo dejar constancia con este resumen. Desde aquí os animo a hacerlo a todos.
Todo se ha ido paliando y mejorando posteriormente, después de cada reunión, gracias a las redes sociales con las que hoy contamos, que nos han permitido, en primer lugar, estar comunicados los que iniciamos estos encuentros en aras de conseguir integrar a cuantos más compañeros mejor. En segundo lugar y afianzado este pequeño grupo al que se le conoce por los Califas, conseguir que el grupo vaya creciendo en número y lo que es más importante en cariño. En tercer y último lugar, y más importante aún, nos ha permitido estar comunicados con los compañeros no residentes en Córdoba. WhatsApp, Facebook, Dropbox, Drive o el blog nos tienen en comunión, día a día, hora a hora, minuto a minuto, incluso durante la madrugada. Aquí no puedo dejar pasar el momento sin agradecer, al deshacedor de entuertos informáticos RAFA VILAS la valiosa ayuda que nos ha prestado a todos, así como a los administradores de WhatsApp y Facebook Paco Moreno Osuna y Carlos Arrabal Caamaño por su colaboración.
Si a todo esto añadimos que se unió al grupo de WhatsApp nuestro compañero de Fernán-Núñez, -hoy residente en Bubión, en Las Alpujarras granadinas-, Antonio Luna Rodríguez, alma mater e integrador también de un gran número de compañeros en encuentros anuales, a los que he asistido en diversas ocasiones, puedo decir, también sin temor a equivocarme, que estamos en el camino de formar un grupo humano, plural en lo político, ideológico, incluso en lo religioso,  pero totalmente unido en unos valores y unos principios que debemos no solamente a nuestros padres, sino principalmente a la formación recibida en nuestros queridos seminarios de Hornachuelos y para muchos de nosotros, en San Pelagio.
Un breve apunte del porqué de la Sociedad de Plateros para nuestras reuniones.
Aclarar en primer lugar que cuando decidimos iniciar nuestros encuentros pretendimos hacerlo con vocación de continuidad pero sin fijar fechas ni periodicidad y sin designar un lugar concreto sino ir rotando y propuse, para integrar a los sacerdotes de nuestro curso, empezar por darle la sorpresa a Pedro Soldado, Párroco de San José y Espíritu Santo, en el Campo de la Verdad, junto a la Torre de la Calahorra y buscar para la reunión un bar cercano,  para posteriormente hacerlo en otros bares, también cercanos a las Parroquias de la Virgen de Linares y Las Margaritas para poder reunirnos también con sus respectivos párrocos, nuestros  compañeros Manolo Vida Ruiz y Antonio Caballero Medina.
Cuando cité a Andrés Luna Prieto y me comunicó que no podía asistir por su imposibilidad física debida a su enfermedad lo tuve muy claro, la segunda reunión sería junto a su casa, en la Sociedad de Plateros de calle San Francisco nº 6,  porque también sabía que tanto Manolo Vida como Antonio Caballero se integrarían en nuestras reuniones, dentro de sus posibilidades, en cuanto pudiesen. (Antonio Caballero aún no ha podido, espero que sea en la próxima, pero el bueno de Manolo Vida está totalmente integrado en el grupo. A Pedro no le citamos porque ya nos dijo que el jueves, era un día muy complicado para él ya que a esa hora recibía a los novios que se preparaban para el matrimonio. No obstante seguimos contando con él).
Pretendía ser breve pero se me agolpan tantas y tantas ideas que hacen imposible esa brevedad por lo que empiezo sin más, a resumir las seis reuniones celebradas hasta el momento.

Primera reunión en San José y Espíritu Santo.-

Juan Parra acompañado de sus primos Pedro y Juan García Gijón.
Francisco Solano Raya, Paco Nieto Molina, Paco Contreras, Diego Ruiz Alcubilla,
Francisco Sánchez, Paco Moreno, Gines Blanco y Antonio Gómez.
Jueves día 5 de Junio de 2014 a las 20:00 horas en el Bar Miguelito del Campo de la Verdad. Nos citamos justo a la entrada de la Iglesia de San José y Espíritu Santo, y allí, conforme íbamos llegando, surgieron los primeros abrazos, las primeras emociones de los reencuentros; como al tratarse de dar una sorpresa no avisé a Pedro, nuestro cura párroco no estaba, por lo que le llamé por teléfono diciéndole que había venido con un par de amigos a visitarle; Pedro estaba comprando. Mientras llegaba, siguieron los saludos, los abrazos, y empezamos a reconocernos unos y otros. Yo ya había visto anteriormente a la mayoría, a Pedro muchísimas veces, pero no conocía a los primos de Juan García Parras ni a Ginés, llevándome un gran alegrón al reconocer tras tantos años a Paco Sánchez Sánchez, con su sonrisa picarona y con un “par o tres” kilitos de más. Cuando llegó Pedro quedó sorprendido al ver a tanta gente y muy pensativo se expresó más o menos así: “quienes sois, vuestras caras me suenan, creo que os conozco pero no se... “. Su mirada mostraba, aparte de indudable sorpresa, gran interés; buscaba a marchas forzadas en el disco duro de sus recuerdos hasta que, unos y otros no pudimos resistir y empezamos a darnos a conocer. Como anécdota, cuando le pregunté si conocía a Paco Contreras (al que Pedro siguió viendo bastantes años con Diego Ruiz y otros compañeros de seminario) nos dimos cuenta que miraba con insistencia a Paco hasta fijar su mirada en su mano izquierda y fue entonces cuando le reconoció, “tú eres Paco Contreras” dijo con una muy expresiva muestra de alegría dibujada en su rostro y que lógicamente también se dibujaba en el de Paco y en cada uno de los de quienes allí nos concentrábamos.
La reunión la tuvimos que celebrar sin Pedro por el motivo antes expresado y se desarrolló en un ambiente de alegría y cordialidad, yo diría de hermandad, durante más de tres horas. Hablamos de todo, pero indudablemente fueron las anécdotas vividas en el Seminario por cada uno, -entre vinos de la tierra y cervecitas, con las que brindamos por nuestra amistad, por los presentes y por los ausentes-, las que centraron la mayor parte de dicho tiempo. Todo ello grabado para la posteridad con fotos de móviles y principalmente de la cámara automática de Paco Moreno Osuna.
Allí expuse el motivo e hice la propuesta de tener el segundo encuentro en Sociedad de Plateros y allí también se concretó por unanimidad.
Huelga decir que al comunicarle a Andrés Luna la decisión tomada sobre el lugar y el motivo de celebrar la segunda reunión en Plateros, frente a su casa, algo que no podía imaginar, se llevó un gran alegrón y empezó a ver esa luz y ese horizonte que, como él dice en un artículo en Facebook y en diversas ocasiones en WhatsApp ha ratificado, le ha devuelto la alegría. Más adelante, en su mes correspondiente haré un comentario sobre ello.
Estuvimos en dicha reunión: Juan García Parras, sus primos Pedro y Juan García Gijón, Antonio Gomez Ramírez, Ginés Blanco Rubio, Francisco Sánchez Sánchez, Diego Ruiz Alcubilla, Francisco Nieto Molina, Francisco Moreno Osuna, Francisco Contreras González ....y un servidor.

Segunda reunión en Plateros.- 

De pie: Paco Moreno Osuna y Manolo Aranda Madueño.
Sentados: Andrés Luna Prieto, Francisco S. Raya Marqués,
Francisco Sánchez Sánchez y Diego Ruiz Alcubilla
Miércoles día 18 de Junio de 2014 a las 20:00 horas en el Bar Sociedad de Plateros de la calle San Francisco nº 6, final de la calle la Feria (en adelante sólo Plateros).
Estuvimos en dicha reunión: Andrés Luna Prieto, verdadero protagonista de la misma y Manolo Aranda Madueño, repitiendo de la anterior sólo Francisco Sánchez Sánchez, Diego Ruiz Alcubilla, Francisco Moreno Osuna, ....y un servidor.
No estuvimos solos no, porque también fueron grandes protagonistas del encuentro nuestros compañeros de fuera, a través de los móviles; muy significativa la de Miguel López Navarro, que lo hizo, aunque no con su presencia física a través de los productos de su trabajo, ya que nos remitió una caja de frutos secos de su marca ANLLELO para que hicieran un buen maridaje con las buenas tapas y sobre todo con el buen vino de Plateros, los famosos peseta y platino. Exquisitos frutos secos, por cierto, que sinceramente le agradecimos a Miguel.
Muy agradable encuentro pese a que faltaron por diversas razones la mitad de los asistentes a la primera y esperábamos más incorporaciones. No fue así pero la reunión se desarrolló en un precioso ambiente en el que, como dejaba apuntado antes, el verdadero protagonista fue Andrés Luna y como no, Manolo Aranda Madueño que se incorporó por primera vez también, pese a estar pasando por un momento delicado de salud. A Andrés ya le había visto anteriormente pero a Manolo Aranda Madueño desde el Seminario y la verdad es que le reconocí al instante ya que es de los pocos que casi no han cambiado, -me refiero a su fisonomía- ya que el tiempo, lógicamente, ha hecho mella en todos y cada uno de nosotros. Andrés estaba especialmente feliz aquel día y allí decidimos, por unanimidad, convocar todos los últimos Jueves de mes en el mismo lugar, en Plateros.

Tercera reunión en Plateros.-

Diego Ruiz Alcubilla, Paco Moreno Osuna, Andrés Luna Prieto,
Francisco Sánchez Sánchez y Francisco Solano Raya Marqués
Jueves día 17 de Julio de 2014 a las 18:00 horas. Al estar cerrado Plateros a esa hora nos reunimos en el Bar cercano de la calle La Feria llamado Los Tres Califas, a la que acudimos cinco personas: ANDRES, DIEGO y los tres Pacos, Moreno, Sánchez y Raya, surgida de la necesidad de seguir preparando nuevos encuentros y estrategias para localizar a más compañeros. Por tanto fue una reunión de trabajo, debiendo mencionar en este apartado, que cualquier momento es bueno para reunirnos y trabajar en el fin común de la integración de cuantos más compañeros mejor, tanto del grupo de Hornachuelos 63 y 64 como de los cursos siguientes. Como ya sabéis, también utilizamos cuando el trabajo nos lo permite, breves pero intensos encuentros en el Bar EL CALLEJON, en la calle Marqués del Boil, también para preparar encuentros, facilitarnos información,y de paso aliviar nuestro espíritu con una copita de vino de nuestra tierra y unas inmejorables tapitas caseras.

Cuarta reunión en 3 Califas.-

Francisco Sánchez Sánchez, Andrés Luna Prieto, Paco Moreno Osuna,
Diego Ruiz Alcubilla y Francisco Solano Raya Marqués.
Jueves día 28 de Agosto de 2014 a las 18:00 horas. Al estar cerrado Plateros, por vacaciones, hicimos la convocatoria en el mismo lugar de la vez anterior, en el Bar llamado Los Tres Califas, a la que acudimos otra vez los cinco de la anterior: ANDRES, DIEGO y los tres Pacos, Moreno, Sánchez y Raya. Esperábamos a más compañeros pero, sin saber porqué, no acudieron y ello me supuso una pequeña decepción ya que se venía abajo la idea preconcebida en los comienzos de que reunión a reunión el grupo iría aumentando; no obstante, el decaimiento fue momentáneo y decidimos seguir adelante porque el grupo ya se había aumentando con nuestros compañeros que viven fuera, que no foráneos, y que nos han animado desde el principio como Rafa Vilas García, Miguel Sánchez Navarro, Paco Polo Lara, Antonio Crespo García, a los que nosotros también animábamos a reunirse en las sedes de Madrid (Centro) y Este (Elche o Valencia).
Ya puestos, en el doble sentido de la palabra, me arrancaron un poquito de canto gregoriano que, confieso, lo hice muy a gusto, en primer lugar por todos vosotros, mis compañeros y en segundo lugar, porque me encanta hacerlo, aunque no fuese ni el momento ni el lugar más adecuado para dicho canto.
Cuando empezamos a hacer nuestras fotos, al levantarnos, observamos que nuestra mesa estaba presidida por un hermoso cuadro conmemorativo de los 5 Califas del Toreo, nos miramos y decidimos que los allí presentes, en adelante seríamos conocidos por los 5 Califas, lo que hasta que no se revoque el nombramiento seguiremos ostentando. Algo bastante democrático porque la decisión fue tomada por unanimidad.
Lo que no considero nada democrático y así debo decirlo a todos, fue el nombramiento de Padre Rector que en mi humilde persona hizo A DEDO el hermano Diego Ruiz Alcubilla, que yo lógicamente agradezco pero que, sinceramente creo que debo poner a vuestra disposición para que en la próxima Asamblea o reunión se someta a votación por si hubiese otros candidatos.


Quinta reunión en Plateros.-

De pie:Diego Ruiz Alcubilla, Manuel Tenor Gómez, Manuel Vida Ruiz,
Manuel R. Muñoz Medrán, Francisco S. Raya Marqués. Francisco Sánchez ,
Rafael Vilas García, Francisco Moreno Osuna y Francisco Nieto Molina.
Sentados: José López Pedrosa, Antonio Bazuelo Luque, Andrés Luna Prieto,
Antonio P. Llamas, Manuel Lucena Aguilar-Tablada y Francisco Contreras.
Jueves día 25 de Septiembre de 2014 a las 20:00 en Plateros. Si buscamos un término para definirla, ésta sería el de APOTEÓSICO por muchos motivos. En primer lugar por el número de compañeros que asistieron, por la entrega de los sellos conmemorativos que gustosamente nos regaló Rafa Montes Santiago, por la asistencia de varias de nuestras santas esposas y por esa música, Barcarola y otras y especialmente esa canción que cantamos a una sola voz y que servirá para futuras reuniones como nuestro himno, el Friends for evers o Amigos para Siempre, con una letra modificada para la ocasión por Paco Molina Pavón, que vino desde Málaga cargado hasta los topes entre música y bafles.
Manuel Aranda Madueño, A. Bazuelo, J. López Pedrosa, M. Tenor,
M.R. Muñoz Medrán, Carlos Samaniego, F. Moreno, F. Contreras,
D. Ruiz Alcubilla, M. Vida, R. Vilas y sentados: Andrés Osado Gracia,
F.S. Raya, A. Luna, F. Molina Pavón, A.P. Llamas y M. Lucena
Entre las nuevas incorporaciones, permitidme que le destaque, RAFAEL E. VILAS GARCIA, desplazado desde Madrid con su esposa Carmen y que vivió un fin de semana intenso, invitados por Paco Moreno y su esposa Isabel. Y quiero destacarlo porque, aunque todos parecíamos niños con zapatos nuevos un Domingo de Ramos, a Rafa se le veía inmensamente feliz; no en vano, desde su lejana Madrid y desde el primer contacto con nosotros, se ha entregado por la causa con tal pasión, que sería injusto no reflejarlo. Gracias Rafa porque sigues siendo un pilar fundamental de esta hermosa locura colectiva.
Destacar también a Antonio Bazuelo Luque, porque también se tuvo que desplazar, como Vilas y Molina, y fue otro a los que ví especialmente feliz; finalmente a Aranda Madueño, al que ví más recuperado y Manolo Vida porque me consta su implicación pese a su escaso tiempo.
Dar las gracias también a Carmen, Sole, Jenny e Isabel, esposas de Vilas, Medrán, Luna y Moreno, por haber dado ese primer paso en lo que, seguro será, una futura buena amistad y que con el tiempo, estoy seguro también irá aumentando tanto en número como en intensidad.
Perdonadme los demás porque todos y cada uno de nosotros, en mayor o menor medida, también somos fundamentales para que nuestro grupo, no sólo se mantenga, sino que se haga cada vez más numeroso y sobre todo más unido.
Se hablaron tantas cosas.... pero, vuelvo a insistir, se formaron tantos corrillos, tantas conversaciones a la vez, que es imposible destacar algo salvo el hermoso final cantando juntos ese AMIGOS PARA SIEMPRE.
Es una asignatura pendiente que en próximas reuniones intentaremos paliar en lo posible.
De nuevo se hace presente Miguel López Navarro con su caja de frutos secos, esta vez añadiendo unos panes de higos inmejorables. Gracias de nuevo Miguel.
Y como nos enseñaron a dar, antes que a recibir, apareció Pepe López Pedrosa con un sobre que contenía los sellos conmemorativos de nuestro aniversario en Hornachuelos que gustosamente nos prometió nos regalaría nuestro compañero de Cabra, Rafael Montes Santiago. Muchas gracias también Rafa.
Hablamos de nuestros compañeros fallecidos, especialmente de JUAN NAVAS SÁNCHEZ y su Diario que ya está colgado a disposición de todos, de los enfermos como Paco Ligero Leiva, aquejado de Alzeimer, y de tantos otros que nos acompañaron, seguro, desde arriba en el Cielo.
Asistimos a la reunión: Los 5 Califas (Andrés Luna, Diego Ruiz y los tres Pacos, Moreno, Raya y Sánchez), Carlos Samaniego, Aranda Madueño, Bazuelo Luque, López Pedrosa, Manolo Tenor, Muñoz Medrán, Paco Contreras, Manolo Vida, Rafa Vilas, Andrés Osado, Paco Molina y Paco Nieto. También fueron invitados y acudieron Antonio Pedro Llamas Trujillo (o Pedro Antonio) y Manuel Lucena Aguilar Tablada, que aunque es mayor que nosotros le entusiasmó la idea de nuestro encuentro.
Para dicho encuentro hice un Soneto, ya publicado en nuestra página de Facebook., que se quedó en el ordenador de mi trabajo y no pude llevarlo, de lo que posteriormente me alegré porque Paco Molina puso la guinda con la música y la canción de AMIGOS PARA SIEMPRE. Momento precioso que como dije anteriormente, vivimos intensamente y que quedará como Himno para nuestras reuniones venideras.
No obstante destacar el sentido del soneto que no es otro que el espíritu del encuentro que unía nuestros corazones no era otro que la ilusión y los recuerdos de unos niños, ya mayores, y habla del Seminario, del río, del pueblo, del paisaje, de los olores, de la música y de los juegos; de la importancia de nuestros profesores en nuestra formación. Finalmente habla de fundirnos en un fuerte abrazo alzando nuestras copas al cielo para brindar con buen vino por los compañeros fallecidos, por nuestra lealtad y por el cariño que nos profesamos.

Sexta y por ahora, última reunión en Plateros.-

M.R. Muñoz Medrán, M. Vida, F.S. Raya, F. Sánchez, A. Gómez Ramírez,
Francisco Contreras, D. Ruiz Alcubilla, Jesús Yamuza, F. Moreno, A. Osado
y delante: Juan Hinojosa Berni y Andrés Luna Prieto.
Jueves día 30 de Octubre de 2014 a las 20:00 horas en Plateros.
En vísperas de la misma y pese a haber estado todo el mes animando a los compañeros a ir numerándose en el wassap. -Andrés Luna me decía una y otra vez, en público y en privado “Paco cuantos somos” lógicamente preocupado por reservar una mesa grande para todos-, nadie decía nada. Empecé a preocuparme porque yo mismo tenía que someterme a una prueba médica y no sabía como me iba a encontrar esa tarde.
Mi preocupación se tornó todo alegría y esperanza cuando con una puntualidad inglesa, a la puerta de Plateros nos encontramos trece compañeros, agregándose posteriormente dos más, en total un precioso número, 15 que establecía un nuevo record de asistencia. No es el deseado pero todo se andará para conseguirlo.
Asistimos a dicha reunión Antonio Gomez Ramírez, Francisco Sánchez Sánchez, Diego Ruiz Alcubilla, Francisco Nieto Molina, Francisco Moreno Osuna, Andrés Luna Prieto, Andrés Osado Gracia, Francisco Contreras González, Juan Hinojosa Berni, Manuel Vida Ruiz, Carlos Samaniego Ortiz, Jesús Yamuza Redondo y un servidor. Mención especial para el debutante Jesús Yamuza Redondo al que es de agradecer se desplazara desde Posadas. Como tantos otros nada cambiado pero como casi todos, con esos kilos de más y la pérdida de cabello.
Después aparecieron Manuel Rafael Muñoz Medrán y Juan Manuel Ballesteros Aguilera (otro debutante con las mismas características que todos nosotros, es decir, calvicie y algún kilito de más).
No acudió ninguna de nuestras santas.
Esta reunión tuvo, sin embargo, una asistente especial y no fue otra que nuestra admirada VICARIA en forma de camiseta blanca, invitada por nuestro querido compañero Andrés Osado y con la que fue investido nuestro no menos querido compañero Andrés Luna.
Pero es tanta la comunión que existe a diario en nuestro WhasApp que no sólo partió de Andrés la idea de invitar a nuestra admirada VICARIA sino que también fue invitada por Paco Moreno, esta vez revestida de un rojo intenso que bien podría significar la pasión que todos y cada uno de nosotros está poniendo por el afianzamiento de este grupo.
Resalto aquí lo comentado por Andrés el día 4 de Noviembre de 2014 como comentario al artículo de su tocayo Andrés Osado y a los diversos comentarios que dicho día hicimos en WhasApp: “Con respecto a algunos comentarios de hoy en el guasa sobre mi disponibilidad de responder al instante, he de manifestar: Me habéis abierto un horizonte nuevo con la creación de este grupo. Antes mi horizonte, tras el ictus, solo estaba visible por unos oscuros nubarrones que no permitían ver más claridad, o no lo sabía admitir, pero aparecísteis vosotros y oh! Milagro, apareció un cielo raso con rayos del sol, por eso sois tan importantes para mí. Se ha abierto una nueva ventana en mi vida que me hace ver claridad y esa luz sois todos vosotros. Y me siento tan feliz. Un abrazo a todos.”
Por mi parte quiero decir que son muchas las razones que me ilusionan y me hacen vivir con intensidad ésta gratísima experiencia de los reencuentros, la bendita locura de este maravilloso grupo pero, sinceramente, aunque todos me habéis aportado y a todos os aprecio, por sólo verte feliz, amigo Andrés, como bien se deduce que lo eres en tu comentario, ya me hubiese valido la pena.
Un fuerte abrazo compañeros, mil perdones por lo extenso y muchísimas gracias por vuestra atención.
Os espero en la séptima reunión que será si Dios quiere el próximo día VEINTISIETE  DE NOVIEMBRE DE 2015 (JUEVES) A LAS 20:00 HORAS EN LA SOCIEDAD DE PLATEROS DE LA CALLE SAN FRANCISCO NÚM. 6 (FINAL DE LA CALLE LA FERIA) y en la que seguro vamos a reencontrarnos con nuevos compañeros.

Córdoba, doce de noviembre de dos mil catorce.

sábado, 8 de noviembre de 2014

4ª Reunión GRUPO MADRID

Circulo Granjeño de Leganés

 Cónica de Antonio Estepa Romero

Rafael Vilas, Victoriano Castillejo, Consuelo, La Vicaria, Andrea, Antonio Estepa y Antonio Crespo.

      Con la puntualidad del AVE, Rafa Vilas nos estaba esperando en el coche. Cuando nos vio, salió del vehículo con la agilidad de un paquidermo (ya somos dos),  para abrazarnos. Carmen se había quedado en casa indispuesta.
        Salimos hacia Leganés. ¡Ahora, sí! El coche se deslizaba por la calzada como una falúa real por las aguas del Tajo a su paso por los Jardines del Príncipe de Aranjuez. ¡Daba gloria bendita, oye!
      Cuando llegamos, Vilas se puso en contacto con Castillejo para darle nuestras coordenadas. Habíamos errado en unos 400 metros. Victoriano y Consuelo ya venían a nuestro encuentro. De nuevo, encuentro emotivo.
      De camino hacía el Círculo Granjeño, Victoriano me iba comentando entre risas que los “wasas” eran de locos. O leías los tres millones o no te enterabas de ná.  En la puerta del Círculo nos esperaba Antonio Crespo, sin Cari que estaba atendiendo a la abuela. Nos acomodamos en una mesa y empezó la velada. La noche prometía. Como siempre estuvimos alternando recuerdos con vivencias actuales. Una mezcla de sentimientos compartidos que nos va calando y uniendo poco a poco de nuevo nuestras vidas. Momentos de amistad que nos salen a borbotones y que estamos impregnando a nuestras mujeres. Daba alegría ver a Consuelo y Andrea dialogando como si se conociesen de toda la vida.
        Entre comentarios, anécdotas, etc., Rafa se dejó caer con dos chistes de antología. Llevaba tiempo que no me reía tanto escuchando un chiste. No he visto a nadie interpretarlos mejor. Emuló a un cura y a un obispo, en sendas homilías, con tanta gracia que parecía ver a los consagrados en el púlpito.¡Inmenso, Rafa!
         ¡Qué pronto se pasa el tiempo cuando estás a gusto! Llegó la hora de la despedida. Con el corazón henchido de satisfacción por el encuentro, nos despedimos con la ilusión de vernos pronto de nuevo.
       La llegada a Móstoles con la suavidad de un Boeing 747 tomando tierra en el Adolfo Suárez Madrid-Barajas. ¡Un 10 querido Rafa!

 7 de noviembre de 2014


martes, 4 de noviembre de 2014

¿SOMOS 63, 63-64 o 63 y 64?


Era el día señalado, 30 de octubre de 2014 y (como pasa en El Cortes Inglés, cuando van a abrir por la mañana,  donde un buen rato antes ya se empieza a formar  la cola)  allí estábamos, en la puerta de la Sociedad de Plateros. Aún faltaban unos minutos para que dieran las ocho de la noche. La puntualidad de la Sociedad de Plateros espartana. Sin embargo, los abrazos no habían podido esperar y la alegría comenzó a derramarse por aquella calle de San Francisco, frente a la casa de nuestro amigo Andrés Luna, la de siempre, aunque con algún retoque. (Fijaos la coincidencia: si ponemos las iniciales de la Sociedad de Plateros, S.P. ¿nos os viene a la memoria nuestro equipo de futbol del Seminario, cuando estábamos ya en Córdoba? Pues a   partir de aquí lo designaré S.P.)

También nosotros éramos los mismos, aunque con algún otro retoque,  porque desde aquel instante, bueno yo creo que desde que salíamos de casa para la reunión, nuestros sentimientos se retrotraían al año 1963 y 1964.

Hago ahora un paréntesis. Terminada la reunión, llegué a casa, a eso de la una de la madrugada. Un impulso me incitaba a escribir algo en el Facebook. Como dice una amiga mía escritora, no se han de dejarse pasar esos momentos, porque de lo contrario se perderán  las ideas y luego será difícil recuperarlas. Y más a mí, que mi neurona no da para mucho. Sin perder un momento me puse delante del ordenador y fluyeron las palabras. Puede parecer que lo que escribí no reflejara los momentos que allí se vivieron pero sólo trataba de plasmar, en un pequeñín de los años 63, a todos los demás aquellos cursos del 63 y 64, que aunque pequeños también, fuimos catalogados como medianos o mayores (sólo en estatura) estuvimos respirando los mismos sueños que se entrecruzaban  en aquel seminario de Hornachuelos.

Pues bien, con esa vestimenta de niños pequeños entramos en el lugar acordado. Aún tardamos en sentarnos porque resultaba difícil desprenderse de la conversación iniciada en las afueras del local. Paco Moreno, Diego y yo suspendimos la conversación que llevábamos entre manos. Poco a poco fuimos tomando sitio hasta que las copas de vino dieron la bienvenida, por primera vez, a nuestra Vicaria, emblema de nuestra unión, que tan magistralmente ha dejado para la historia nuestro compañero Rafael Vilas, al que volvimos loco con nuestras sugerencias.  Andrés Luna parecía un niño con zapatos nuevos cuando le pusimos la camiseta (confeccionada artesanalmente) blanca, con la insignia de la Vicaria. Paco Moreno se colocó a su lado,  luciendo “terna de chaleco blanco leche, pantalón vaquero azul despintado y camiseta roja que apenas dejaba verse” (esto me ha salido muy torero) Una vez hechos los honores y sin abandonar el centro de atención dejó caer su chalequilla lechosa y dejo entrever su impecable e impoluta camiseta roja donde figuraban en la parte delantera superior izquierda la insignia, en pequeño, de la Vicaria y en la espalda una que ocupaba casi toda ella. Al  unísono, y a los gritos  de ¡guapo, guapo! volvieron a sonar los chasquidos de los flases. Fue un momento emocionante y a la vez radiante. (El pobre Paco Moreno tuvo que estar con su chaqueta puesta hasta que Andrés no se colocara la camiseta blanca con la insignia, ya que no quería estropear el momento. Menos mal que dentro no hacía mucho calor. Fue un detalle por su parte)

Andrés Luna quedó a su vez más maravillado y mirando a la blanca y a la roja, me dijo sigilosamente:


-Tocayo, esa me gusta más que la blanca, ¿a ver dónde se la apañao? Yo quiero una.

Efectivamente, la roja estaba mejor que la blanca.  Había sido confeccionada “con bordados de oro y plata”, o séase, que estaba hecha profesionalmente y por lo tanto molaba más. Así empezó a debatirse la conveniencia o no de que se hicieran más camisetas para que todos las luciéramos por igual y mejor. El caso es que, al final, creo que no llegamos a  un acuerdo, pero la verdad es que yo quiero también una.

Nuevamente volvimos a disfrutar, intercambiando momentos vitales que se nos venían a la mente.

En un momento concreto me quedé solo observando al grupo: si cuando venía de “mear”, que después de tanto beber se requiere algún momento de intimidad. La secuencia de aquella situación (no la mia sino la del grupo, pillines) era digna de ser contemplada. Todos gritando, contando sus cosas de manera atropellada, como si el tiempo fuera a acabarse de un momento a otro. Pero sobre todo, por esa sonrisa que se entretejía en  los rostros de los presentes. Allí había algo más que voces e historias. Se palpaba el cariño y la bondad con la que cada uno se mostraba. Allí había hermanamiento por doquier, porque si bien las paredes y techos del Seminario de Hornachuelos estaban demolidos, en nuestro corazón seguían intactos ya que intactos seguían siendo nuestros recuerdos y el lazo de unión que allí se forjó. A pesar del tiempo transcurrido parecía como si nunca hubiéramos estado separados. Estaban presentes en aquella reunión todos los ausentes, se les sentía tan reales que casi se palpaban. Fue también en ese instante, cuando se me vinieron a la cabeza las palabras, inconclusas, de Diego y Paco Moreno, con la que habíamos entrado al bar:

-Insisto –dijo Diego- ha de quedar claro en la insignia de la Vicaria que somos y ha de referirse a los dos cursos. Los del 63-64 y los del 64-65.

-Pero mira Diego – enfatizó Paco Moreno- cuando Rafael Vilas modificó esas fechas las puso con números romanos para que así quedara claro que se trataba de los dos cursos, de ahí lo de LXIII – LXIV

La escena que allí observé dejó clara esta cuestión ¿acaso no estabamos demostrando que lo surgido durante aquellos años era algo que no puede separarse? Que las vivencias allí  surgidas ¿no estaban  interrelacionas y no podían desconectarse? Pues tomemos a la Vicaria como referencia de aquellos cursos. Que viva muchos años entre nosotros y sigamos viéndonos por siempre. ¡NO SOMOS DOS CURSOS, SOMOS TODOS EN UNO DONDE CABE QUIENQUIERA!

Una vez cerradas las puerta de la S.P. aún permanecimos un buen rato. Al parecer no habíamos tenido bastante. Volvimos a inmortalizar el acto con otra andanada de fotos y para no asustar al gran silencio de la calle San Francisco que nosotros habíamos alterado, nos retiramos a casa, con la ilusión de volver a encontrarnos de nuevo.

 Andrés Osado Gracia


Córdoba, 30 de octubre de 2014

                                                                                                                   



martes, 28 de octubre de 2014

FILI HA VENDIDO SU CASA

        Hoy, como siempre que publica algo en su blog, he leído el último artículo de José María Rivera, Fili para los amigos. Se titula calle Alfarería17. Cuando comencé a leer un pellizco se agarró en mi interior. Fili había vendido su casa. No es que yo tuviese interés en comprarla. Yo solo había estado una vez en su precioso chalet de Sevilla, pero los recuerdos de aquel día quedaron muy grabados en mí. Como él dice, “nuestra casa ha sido siempre generosa posada, para hermanos, sobrinos y amigos”.

        Después de muchos años sin vernos alguien tuvo la buena idea de juntar a los antiguos compañeros del Seminario. Sería en la casa de Fili. Motivos para esta reunión no hacían falta, simplemente el juntarnos los amigos que tantos años habíamos compartido: estudios, inquietudes, amistad y rezos. Pero José María, médico de profesión, sabía de la enfermedad de un compañero, Antonio Lara. Un maldito cáncer iba lentamente comiéndose su vida y estaba ya en una fase muy avanzada. Ya sobraban motivos y excusas para reunirnos. Y allí, un sábado por la mañana, de no recuerdo qué mes ni qué año (creo que hace ya casi veinte años) llegamos, muchos incluso con los niños aún pequeños. Abrazos, recuerdos y presentaciones. Charlas largas y distendidas recordando aquellos años que compartimos, primero en los Ángeles y más tarde en San Pelagio y en San Telmo, en Sevilla.
        Poco antes del mediodía apareció Antonio Lara acompañado de Lola, su mujer. Los signos de la enfermedad aparecían marcados en su cuerpo. Le abrazamos y él, con una leve sonrisa y una pequeña lágrima, fue respondiendo a cada uno de los que allí nos habíamos reunido.
      El día fue largo. Charlamos y recordamos. Reímos y añoramos todos los años compartidos. Durante la comida él apenas probó bocado: “José María me ha dicho que esto no lo debo comer” y es que Antonio Luna había puesto para degustar un sabroso plato de jamón.
          En los Ángeles apenas si tuve relación con él. Las amistades en esta época eran más bien por paisanaje o por haber coincidido en el dormitorio, clase… o simplemente por compartir juegos (pinchoncho, futbol en el llano…). En San Pelagio nos fuimos conociendo un poco más. Su apellido y el mío hacía que coincidiéramos en alguna actividad o clase. Entre sus aficiones, como a la mayoría de nosotros, estaba jugar al fútbol, y no lo hacía mal. Muy aficionado al Barça. Aún recuerdo cuando recibió de su querido club un póster y una foto dedicada de Miguel Reina. En Sevilla tuvimos bastante más relación. El Seminario de Córdoba lo formábamos un grupo no muy numeroso dirigidos por tres curas –que en los tiempos actuales se echan de menos-: Luis, Antonio, Pascual y poco después Pepe González. Aunque no compartíamos piso los contactos eran más continuos. Ratos de charla en el patio de San Telmo antes de entrar a clase, visitas a la “casa madre”, que es como llamábamos al piso donde habitaban el grueso del grupo cordobés. Ejercicios espirituales en Torrox, San Antonio en Córdoba… Años en Sevilla, donde ya cada uno fue marcando su futuro.
        La tarde caía y ya cada uno debía volver a su destino, algunos un poco lejos. Uno a uno nos dijimos adiós. Le di un fuerte abrazo deseándole su pronta recuperación. Una triste sonrisa agradeció mis deseos.
      Antonio, tu despedida fue el nacimiento de este grupo. Desde entonces cada año nos reunimos para seguir recordando y añorando aquellos años que compartimos y que a muchos nos ayudó a madurar y a enfrentarnos a la vida con fuerza y valentía. Hoy día, con caminos muy diferentes, agradecemos esos años de formación que comenzamos en noviembre de 1963, cuando apenas éramos unos críos.
      Quiero recordar también de forma muy especial a mi paisano y amigo Manolo Estepa , que no muchos años después nos dijo adiós. Y, cómo no, a todos aquellos que comenzaron con ilusión de niños aquel otoño del 63 y que hoy ya no están entre nosotros.

José López Pedrosa

Córdoba, 28 de octubre de 2014

sábado, 18 de octubre de 2014

Tres crónicas del grupo de Madrid por Antonio Estepa Romero



1ª REUNIÓN GRUPO MADRID

5 de septiembre de 2014

Centro Regional de Andalucía en Móstoles

Se presentaba una tarde intensa. Después de 50 años nos íbamos a reencontrar de nuevo cuatro compañeros, cuatro amigos, cuatro hermanos. Rafa Vilas, como siempre, lo tenía todo previsto.

Llegó el momento. Después de los sentidos abrazos, la pregunta de siempre: ¿Tú quién eres? Los nombres fluían a nuestra memoria como un torrente. Teníamos que hacer un verdadero esfuerzo mental para ubicar las nuevas caras a 50 años atrás. Pero no importaba. De nuevo estábamos juntos. Nos prepararon unas mesas en la terraza del Centro y empezamos a recordar. Como un resorte, los cuatro, Antonio Crepo, Rafael Vilas, Victoriano Castillejo y yo, nos trasladamos a Los Angeles. Al mismo tiempo, Carmen, Consuelo y Andrea comenzaban a conocerse. Cari, la mujer de Crespo no pudo venir por tener que cuidar de la abuela. Fue inolvidable. Pasaban las horas y la conversación seguía adelante quitándonos la palabra unos a otros porque todos queríamos aportar datos. Se llevó el gato al agua, Rafa, que tiene cabeza para tres carreras superiores. ¡Qué memoria! Después de varias horas de amena convivencia quedamos para el segundo encuentro.



2ª REUNIÓN GRUPO MADRID

3 de octubre de 2014

En casa de Francisco César García (El Escorial)

A la hora prevista, nos encontramos Crespo, Vilas y yo en el Centro Regional de Andalucía en Móstoles para coger el coche y salir hacia El Escorial. Victoriano no pudo venir. El conductor era Rafa. Yo iba de copiloto por aquello del mareo; ¡hasta me tomé una pastilla..! El viaje de ida lo hicimos relativamente bien. Llegamos a El Escorial y tuvimos que ponernos en contacto con César porque no encontrábamos la casa. Resuelto el problema nos abrió la cancela de la urbanización y entramos. Nuevos abrazos. Francisco, como perfecto anfitrión, nos estuvo enseñando su casa. Su museo, diría yo, porque llevaba tiempo que no veía tantos objetos juntos. ¡Hasta una primorosa capillita en la parte superior de la casa, tiene el tío! Nos presentó a su tío Luis; un cura vasco de 81 años que fue una verdadera delicia compartir con él charla y mantel. Francisco nos preparó la cena y nos proporcionó música y libros en un pendrive. Se le veía levitando de tanto placer por el encuentro. Después de varias horas tocaba retirada. Sentidos palmotazos en las espaldas y para el coche. El viaje de vuelta no fue tan bueno. Yo no me tomé ninguna pastilla para el mareo. Rafa emulaba a Fernando Alonso en un Gran Premio. ¡Cómo tomaba las rotondas! Y llegó el mareo. Gotas como almendras bajaban por mi ancha cara. Yo callao como un muerto. El entierro iba por dentro. Dejamos a nuestro querido Antonio en Leganés y vuelta para Móstoles. Un par de vueltas a Leganés antes de dar con la indicación para Móstoles. Rafa decía que estábamos perdidos. Yo creo que le costaba trabajo dejar a un amigo. Cuando llegamos a Móstoles, sobre las dos de la madrugada, mis pasos eran indecisos, como los de un hombre que está buscando su casa después de una juerga. Todavía me pregunto de dónde puede salir tanto sudor. Pero mereció la pena.



3ª REUNIÓN GRUPO MADRID

16 de octubre de 2014

Centro Regional de Andalucía en Móstoles

Ya estaban en el Centro, Antonio Crespo y Cari, Rafa Vilas y Carmen y Victoriano Castillejo y Consuelo, cuando llegué. Andrea no pudo asistir porque estuvo todo el día trabajando en Cáritas y estaba muy cansada. Ritual sentido de siempre: abrazos y besos. Tuvimos el placer de conocer a Cari, la mujer de Crespo. Pedimos unas bebidas y unos platos… y al tajo. Nuevos recuerdos, anécdotas, chistes, risas, convivencia de la "güena". En esta ocasión fue una reunión multidisciplinar. Tocamos bastantes temas: política, religión, por supuesto Seminario… Siempre desde el respeto que se profesan los amigos. ¿Quién dijo que no se puede tocar la política y la religión sin salir "peleaos"? Pues nosotros lo hicimos y no pasó nada. Pero es que nosotros somos punto y aparte. ¿Qué colectivo, después de 50 años sin verse, sigue igual que el primer día? Creo que somos personas atípicas. Maravillosamente atípicas. El espíritu de Los Angeles hace el milagro. ¡Qué cura perdimos con Rafa! Lo digo por la labia que tiene. Tiene cabeza para aprenderse de memoria la guía telefónica y razonarla después. ¡Qué tío! eran las 11 de la noche cuando levantamos el campamento. El camarero empezó a poner las mesas en orden, señal inequívoca de levantarnos. Antes, Rafa me metió de clavo la tarea de narraros estos encuentros. Y eso es lo que he hecho. 

domingo, 12 de octubre de 2014

A ESOS NIÑOS LOCOS DEL 63

Córdoba, Sociedad de Plateros. 25 de septiembre de 2014
  
El espíritu que auspicia  este encuentro
y que aúna nuestros corazones
solo hay que encontrarlo en las ilusiones
de niños grandes y hermosos recuerdos:

Un Seminario, un río, un pueblo,
un hermoso paisaje, unos olores,
música y juegos; y unos profesores
que modelaron nuestro intelecto.

Hoy nos fundimos en un fuerte abrazo
y hasta el cielo alzamos nuestras copas
para brindar con nuestro mejor vino:

¡Por los compañeros que se marcharon
y cuantos desde arriba nos apoyan!
¡Por nuestra lealtad!  ¡Por nuestro cariño!


Francisco Solano Raya Marqués
Córdoba 25 de septiembre de 2014